Una forma de sustentar lo aquí escrito, es utilizando estudios relacionados a nuestro tema. Al adquirir nueva información y nuevas experiencias, nuestro encéfalo lo codifica y se ajusta conforme cambian. Una forma de explicar cómo las neuronas mantienen un equilibrio a la vez que se adaptan a un cambio es la plasticidad nerviosa. La plasticidad nerviosa es la capacidad que tiene el encéfalo al cambio en virtud de la experiencia. Estudios sobre la plasticidad nerviosa demuestran la importancia de la experiencia para el desarrollo nervioso. Mark Rosenzweig, estudió el desarrollo de la plasticidad nerviosa en ratas aisladas y comparó sus resultados con el desarrollo de la plasticidad en ratas criadas en ambientes enriquecidos tanto en variedad de juguetes como interacción social. Como resultado vio que las ratas que estaban en un ambiente más enriquecido tenían neuronas más grandes y mayor numero de conexiones sinápticas que las ratas aisladas (M. R. Rosenzweig, 1984).
